viernes, 24 de septiembre de 2010

Serenidad


La serenidad no surge de vivir en las circunstancias ideales. La serenidad es la capacidad de mantener centrada tu atención, en medio de la dificultad, en aquello que para ti es una prioridad.

La manera en la que enfocamos nuestra atención puede ser fuente de equilibrio o de desequilibrio en nuestras vidas. Si somos dueños de nuestra atención y decidimos enfocarla en lo que para nosotros es lo más importante, mantendremos una mente clara y centrada cuando todos los demás la pierdan.